sueños
Frente al Banco de Chile, "el Banco de todos los chilenos", esta persona pedía limosna. Su bolsa contenía los pocos víveres que había podido comprar, con el fruto de su mano estirada, para alimentar a su familia.
Cesante, jubilado... quizás, un loco... qué importa. Lo importante, es poder obtener el sustento diario de cualquier forma.
La esperanza, nunca se pierde. El lugar, elegido estratégicamente: Un Banco; lugar al que los cada vez menos acaudalados porteños, concurren para efectuar millonarias inversiones.
De esas que son lejanas para este hombre...